Literatura
Guatemala
En una Feria del Libro de Francfort detecté a Guatemala con un stand en el que presentaba sus libros F&G Editores, representados por Raúl Figueroa Sarti y el buen Raúl, tal vez adivinando por su plática conmigo lo mucho que uno de sus libros me iba a gustar, espontáneamente me regaló un
- Detalles
- Por Ricardo Bada
Por esas cosas absurdas pero divertidas de la vida estuve invitado al matrimonio de la hija de una colega italiana de mi esposa acá en Nueva Delhi a finales del mes de abril pasado. Inicialmente estaba un poco reacio a ir a la fiesta porque a duras penas conocía a la colega de mi mujer pero al fin y al cabo la vida se va pasando y últimamente he tenido que participar en más entierros que matrimonios. De tal forma que no lo pensamos mucho, nos vestimos para la ocasión y nos fuimos a la celebración. Debo confesar que la novia estaba preciosa, la fiesta fue entretenida y la comida maravillosa. Un día verdaderamente quimérico, lleno de alegría.
- Detalles
- Por Manuel Cabrales. periodista
Neurótico es una palabra que te describe bien. Debes inspeccionar las repisas de tus libros religiosamente, cada vez que llegas a la casa. Observar que todos los libros están en su lugar, aún sabiendo que no has movido ninguno de su sitio, ni los has prestado (no prestas libros), ni los has extraviado. No están en ningún orden específico que no sea hacerles un resquicio según van llegando, van siendo comprados, adquiridos o según te los van regalando. Sin embargo, tratas de que los escritos por un autor en particular estén juntos, para que se hagan compañía, uno al ladito del otro.
Una vez le escuchaste decir a una periodista de apellido Sontag que habían preguntas que no tenían futuro, "that question has no future", le dijo a quien la entrevistaba. Sin duda es una frase que te gusta, con la que te identificas. Y piensas, ¿cuándo fue que se nos complicó todo? Entonces miras tus cuatro libros de Susan Sontag sobre la repisa de la sala y acaricias los lomos y las portadas.
- Detalles
- Por Yolanda Arroyo Pizarro
Aún durante mucho tiempo después se había sentido tentado de interpretar aquella sospechosa casualidad como una agorera señal del fin de las bellas letras, como el comienzo de la degeneración del Verbo humano. Al mismo tiempo empero, se había obligado a reconocer que tales aprensiones suyas no sólo eran de un patetismo desproporcionado, sino además de penosa fatuidad. Luego de una larga reflexión más serena, se había obligado a aceptar lo acontecido como una real posibilidad de futuro. Cierto es que inmediatamente después había dejado para siempre de escribir, pero seguía esforzándose en escrutar los verdaderos alcances del hecho y de aceptarlo, sin emociones ni banderas, como el inicio de una nueva literatura: una en la que él y un número indeterminado de sus colegas escritores probablemente tendrían poco o nada que decir. O tal vez, mucho más de lo que pudiera pensarse. En todo caso, se había cuidado de no hablar con nadie al respecto. Siempre sólo consigo mismo.
- Detalles
- Por Omar Saavedra Santis
Esther Andradi
Un homenaje a la lengua materna
Esta antología es una aproximación a la literatura en español que escriben quienes viven en otra lengua. La gran mayoría de los autores y autoras de diversos países latinoamericanos radicados en una lengua diferente a la que escriben, viven entre dos aguas, buscando el reconocimiento en el país de origen, destinatario de sus ficciones. Vivimos en París, como escribía Darío, pero París no nos conoce.
- Detalles
- Por Esther Andradi
- Detalles
- Por Samanta Schweblin
Tego se hizo unos huevos revueltos, pero cuando finalmente se sentó a la mesa y miró el plato, descubrió que era incapaz de comérselos.
- Detalles
- Por Samanta Schweblin
- Detalles
- Por Miguel Torres