Américo Ferrari

americo_ferrari_005PAVESAS

Exclusiva para Aurora Boreal®

 

Pavesa: partícula ligera que salta de un metal en combustión y acaba por convertirse en ceniza.
(Diccionario de la lengua española- Real academia española)


 

 

BORRADURAS

 


igual que se han ido borrando

los sueños
se ha ido disipando
la realidad
las cosas y los seres
que decimos que están
que decimos que duran
y de pronto
ya no

 

 

 

 

 

 

 

BORRÓN

la rea
lidad
la ex
istencia
la si es o no es
ahí
y nosotros quedándonos
solos con la rea
lidad
entes estantes
instantes
difusos confusos
cantantes
del silencio
final

 

 

 

 

DOLORES

el dolor de cabeza
-cosa de este mundo-
mortifica un poco
el dolor sin cabeza
-cosa de otro mundo-
mortifica más

 

 

 

 

POEMA TENUE EXTENUADO

adiós poema
tema
del ya no puedo más

 

 

 

 

 

 

MAÑANA

mañana de sueños
desvanecidos
en los desvanes
de la luz

 

 

 

 

 

SILENCIADO

el hombre sin palabras
ya sin habla
se quedó solo entre habladores
mudo
ensordecido
vencido
pugnando por decir
por dejar oir
su silencio
en el estruendo
gregarial

 

 

LEJANÍA

ahora
nos hemos quedado tan lejos
de la vida
que la muerte
tarda mucho en llegar

 

 

 

 

 

 

 

 

 

PARTO

en las entrañas de la diosa
pataleando
para nacer oscuro
y más oscuro
morir

 

 

 

 

 

 

 

 

 

HUIDA

el poema nocturno
se escapó
en la noche

no ha vuelto aún
no volverá ya más

 

 

 

 

 

 

 

 

TRAVESÍA

errando por el aire
que lo sostiene
en el tiempo
un pájaro atraviesa
la eternidad

 

 

 

 

 

 

 

 

 

HARAPIENTO INSAPIENTE

pasea sus harapos
por los desiertos del extramundo
por los mares del cielo
como un ave sin alas
fatigado no
todavía fresco
como un pez que se ahoga en su agua
como un paralítico andando
infatigable
y sin saber nada
de nada
ni siquiera volar
ni siquiera nadar
y ni siquiera andar

 

FEBRIL

vivir con nuestra fiebre
bien calientes
y cuando llegue el invierno
sentirnos mejor que todos los otros
los no afiebrados
que se mueren de frío

 

 

 

 

MAL ESTAR

estamos estando
mal
mañana
quizás a orillas
de un estar bien
ya no estaremos

 

 

 

 

 

 

 

 

CHUPÓN

para crecer
y aprender a hablar
y a escribir
el niño poeta
chupa la teta
de la nodriza
enana
que no sabe hablar
ni escribir

 

 

 

 

 

 

 

QUÉ

hemos perdido la vida
en el vivir
no sabremos nada de nuestra muerte
al morir
entonces qué
entonces por qué
entonces para qué

 

 

 

 

INSTANTE LARGO

ahora
en este instante
estamos estando
en la hora de ahora
sin mañana
sin ayer

 

 

 

 

POBRE HOMBRE

despreciaba a la muerte
ahora
que está por morirse
lleno de congoja
se muere por vivir
la vida
que lo despreció

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

AMBULA SONÁMBULO

el hombre se despierta
en su cama
siendo ya la hora
de levantarse y empezar
a morir
para que la gente no diga:
-pero este hombre que no termina
de vivir...
entonces el hombre se levanta
da unos pasos
dice buenos días a quien quede
y se vuelve a acostar
y se vuelve a dormir

 

 

 

 

 

CORTEDAD DEL DECIR

cuán corto es el decir
cuando uno ya no sabe qué decir
y queda todo por decir

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

FINAL DEL CANTO


todos los que cantaban

y decían el decir

se han ido hundiendo
en el pantanodel palabrear
y ahora
a veces
por encima del charloteo
del vulgo municipal y espeso
se oye apenas el canto
casi silente
de algún humano
aspirante a gorrión

 

 

 

 

 

 

CAÍDA AL REVÉS

nos hemos derrumbado
desde los sótanos más abiertos de la sombra
hasta los patios más cerrados
de la luz

 

 

 

 

 

 

 

 

 

IDA Y VUELTA

hemos venido al mundo
volando por los cielos
arrastrados por un viento
mortal
dejaremos el mundo
cojeando por el suelo
empujados
por el viento inmortal

 

 

DESTINO DE GATO

qué será un día
de la vida de este gato
que nunca ha aprendido a ganarse la vida
ni a perderla

 

 

 

 

 

 

 

 

 

CAMINO

y al fin uno se irá
caminando sin prisa
como para no llegar
adonde nada es

 

 

 

 

 

 

 

 

 

ENTIERRO DE POEMA

del sonoro poema
cuando llegue la hora de enterrarlo
no quedará ya nada
sino el eco del estertor
de un moribundo
y después su silencio recitado
que sonará inmortal
hasta que en nosotros
muera para siempre y
de verdad

 

 

ENCONTRONAZO

muerte:
no nos conoces
no te conocemos
nos hemos cruzado
acá
pronto quizá
nos encontraremos
allá

 

 

 

 

 

 

FUGITIVO

el poema
recién nacido
se está ahí en su cueva
natal
encogido y callado
y nadie lo sacará
de ahí
si no es que él mismo
al fin se escape
dejando unas huellas negras
en la planicie blanca
del papel

 

 

 

 

 

UNO

uno se olvida de su vida
uno descubre ser sí mismo
a cada rato
uno se acuerda de ser otro
de rato en rato
uno descubre ser don Nadie
en el rato de ahora
que es siempre
aunque uno no lo sepa
el rato final

 

 

 

 

 

 

LLAGAS

se han ido extendiendo tanto
por dentro y por fuera
que ya no queda
sino una llaga

 

 

 

 

 

 

 

 

 

DESPEÑADERO

manos
desde la sombra
vienen a asirnos
para despeñarnos
quién sabe adónde
por los despeñaderos
de la luz

 

 

 

 

 

 

 

 

NARCISO AL REVÉS

uno
está mirando su imagen
en el agua
y de pronto
la imagen de uno
le salta encima
lo mete a uno en el agua
y lo mira a él

 

 

 

 

 

 

 

CAMINO HOLLADO

los que murieron en el camino
dejaron sus huellas
otros han caminado sobre esas huellas
y ahora quién sabe
las huellas de alguien
de quién serán
quién será quién

 

 

 

 

 

 

 

 

LA DE AHORA ACABAR

el peligro es
que de pronto
el mundo se acabe
y nos quedemos nosotros
en el mundo acabado
libres
como unos pájaros
que añoraran su jaula

 

 

 

 

 

 

 

LA DE NUNCA ACABAR

pero sucede
que este nuestro mundo
que parece acabarse
ahora
no acabará nunca
de acabar

 

 

 

 

 

 

 

 

FUTURO AL REVÉS

venían los pájaros negros
del lado de allá
se acercaban las sombras
latía el silencio
y uno entraba en la vida
andando para atrás
donde hacen aún señas
las luces del alba
las aves del origen
volando para atrás
siempre más atrás
al más allá
resplandeciendo
en el lugar del principio
que nace
en el fin

 

 

 

NOCHE TEÑIDA DE ROJO

yo estoy escuchando respirar
a una mujer
dormida
y sus respiros perforan el aire
como suspiros de acero
que tiñen la noche
de rojo
y dibujan en el aire
gestos de deseo
que se apagan lentos
en el aire
vestido de gris

 

PER VERSO MUTO

pero de pronto
se pone a blablablar
el perverso
en el poema
y entonces en respuesta
la música callada
invade el verso
y uno oye tan sólo
el eco de un silencio

 

 

 

 

 

 

 

ASFIXIA

y de repente
cuando el silencio nos asfiixia
nosotros manoteando
asfixiamos
la voz

 

 

 

 

 

 

 

 

 

TÍA IGNORANTE

cayó en el mundo
no supo nunca
nada de nadie
y ahora la largan
cargando el peso extenuado
de su ignotía
y allá se las arregle
con el Señor

 

 

 

 

 

 

 

INGRATA

estoy contemplando a muerte
y mi muerte
ni me saluda

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

SUSPIROS

el viento del tiempo los ha ido amontonando en el traspatio de la muerte

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

SILENCIO EN LA NOCHE

horrísono el sonido
que nace
del oído
en el silencio
nocturnal

 

 

 

 

 

 

 

 

 

FINAL DEL CANTO

Para Mario Campaña


todos los que cantaban
y decían el decir
se han ido hundiendo
en el pantano del palabrear
y ahora
a veces
por encima del charloteo
del vulgo municipal y espeso
se oye apenas el canto
casi silente
de algún humano
aspirante
a gorrión

 

 

 

 

 

SURGIR

desde lo más hondo del silencio humano
y el silente animal
surge el poema

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

MENDIGOS IGNORANTES

andan mendigando
pero ignoran qué
a quién
ni para quién

 

 

 

 

 

 

 

 

 

RAT0S

aspirar
esperar
inspirar
respirar
expirar

 

 

 

 

 

 

 

 

 

EL POEMA

se enciende
suena
llamea
y se extingue
y se pierde
en el desierto
en la sombra
en la mudez

 

 

 

 

 

 

 

SENTIDO INSISTENTE

uno entiende al fin
el sentido del sinsentido
cuando descubre
que la nada
se sorbe todo el sentido
y sola sostiene
l sinsentido
de nuestro sentir

 

 

 

 

 

 

 

AÉREO

por el aire erramos
de aire vivimos
y aire son los versos
que en el aire escribimos

 

 

 

 

 

 

 

 

 

ADMIRADO MIRAR

el poema
mira al poeta
y le admira
la visión torcida
que de él
tiene el poeta

y qué vachaché
qué vachaché
con el poeta
con su visión

Material enviado a Aurora Boreal® por cortesía de Martine Ferrari. Obra inédita. Foto Américo Ferrari © Mario Camelo.

Suscríbete

Suscríbete a nuestro boletín y mantente informado de nuestras actividades
Estoy de acuerdo con el Términos y Condiciones