Poesía de Jorge Etcheverry

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Jorge Etcheverry. Chileno, en Canadá desde 1975. Poeta, prosista y crítico, Cronipoemas, su sexto libro de poemas, apareció en 2010. Su novela De chácharas y largavistas y su antología de narradores chilenos en Canadá, Northern Cronopios, son de 1993. Tiene prosa, poesía y crítica en Chile, Canadá, México, Cuba, Estados Unidos y otros países. Su Chilean Poets: A New Anthology fue publicada en 2011, en Estados Unidos. Aparece recientemente en antologías como Antología de poesía chilena I. La generación de los 60 de Teresa Calderón, Lila Calderón y Tomás Harris, 2012; Alquimia de la tierra, de Santiago Aguaded Landero y otros, España, 2013 y en Elogio del Bar, bares y poetas de Chile, Gonzalo Contreras, Chile,2014. Su colección de cuentos Apocalipsis con Amazonas, es de 2015. Es embajador en Canadá de Poetas del Mundo.

 

Selección de poemas para
Aurora Boreal® por el autor

 

Con Gelman y otros a fines del 72 o comienzos del 73 en Santiago

 

Pero estoy casi seguro que fue a comienzos del 73
No tengo muy claro si fue el Pepe
el Nómez o el Nilton, al que balearon unos meses más tarde,
el que armó la reunión o conversa
o a lo mejor Tristán, Julio o el Cayo
Pero ahí estuvimos con Juan Gelman
en Los Cisnes, parece, ¿o fue en Las Lanzas?
en todo caso cerquita de la Facultad
él se había quedado varado en Chile
porque era agregado cultural del trosko Cámpora
que tuvo que renunciar, o mejor, lo renunciaron
para que volviera el caudillo
Pero a nosotros ahí sentados con Gelman
que nos dio unos libros
que nos hablaba de lo que para él era la poesía
y la revolución nos parecía un poco
que se abría un horizonte que se iba a llenar de pájaros
--Y en efecto allá arriba las palomas las gaviotas--
y que él y nosotros nos íbamos a juntar
Más temprano que tarde en un Cono Sur
Qué digo, un continente
Que luego lueguito se nos iba a abrir
Como una flor o un alba que se despliega
Porque los tiempos, la juventud
Los caminos que se abren como cantaron los jaibas
Pero las palomas se hicieron buitres
Y las gaviotas cuervos
Y por el horizonte se adelantó un sol negro
Como en los grabados alquímicos

 

Cornucopia


Cornucopia todavía pero hasta cuándo
Serán los mismos tesoros en tu seno
Los que nos ahogarán
La imagen que liga la tierra a la mujer
No es tan exacta
Hasta cuándo va a parir
Será su fruto veneno o vida
Las olas negras del petróleo nos anegan
Nos dan la vida y nos la quitan
Más bien como un aborto a futuro
En una clínica de barrio
En que ambas mueren
La madre y la hija
Mientras médicos y enfermeras
Discuten partidos de fútbol
La última película
taquillera

 

Cuáquer crudo


En las praderas vastas y perdidas del mito
Que ella cuenta
Haciendo heroica y sufrida a la infancia
Unos niños se despiertan
Subrepticiamente van a la cocina
Con hambre comen cuáquer a puñados
Se despiertan como odres
Gritando por lavativas
Los caballos tienen peor suerte
Hinchados de costado
A la espera de pájaros rapaces
Los encuentran
Medio desdibujados por las moscas que zumban.

 

De la risa y la sangre

 

Eran otros tiempos
Otra ciudad
la de diarios matutinos con espacios en blanco
por los recortes a última hora
que ordenaban los militares
Desaparecían los periodistas
junto a sus reportajes
Pero la gente se contaba en las fiestas
chistes sobre el pinocho
Le imitaba esa voz gangosa
tan chilena
Aunque los comentaristas radiales
fueran hechos callar para siempre
y sus comentarios reemplazado
por el hit más a la moda
Otro continente, claro
Los espacios y sujetos
han cambiado
pero el humor puede seguir siendo
arma de combate
sinó pregúntenselo a Parra
Eso sí
Van a tener que andarse con cuidado
No sea que la interpretación torcida
de algún libro sagrado
O algún oficial de civil
o de uniforme
—ya más al viejo estilo—
Encarnando al poder que sea
Los borre de esta tira cómica
Del mundo

 

Los 43

 

Es otra de las masacres
Que vemos cada vez con más frecuencia
Que explotan en los nuevos medios
Con una luz gélida
Y logran abrirse espacio
En los agencias noticiosas
Donde todo es lo mismo
Con diferentes detalles
Pero esta vez no han podido echarle tierra al asunto
Los estudiantes están de alguna manera vivos
Y siguen en su lucha
Vendrán más inmolaciones
Se descubrirán tumbas colectivas
Las autoridades seguirán sordas
Y ciegas
En el mejor de los casos
Pero estas imágenes seguirán circulando
Se metamorfosearán en semillas
Que alguna vez darán fruto
Florecerán en un orden nuevo
--No tan solo en México--
En que la gente tenga acceso a la vida
Al alimento, la salud
La educación
Gracias a estos héroes
y a los muchos
Que vendrán

 

Desaventurero

 

Que deambula
Desoyendo los mitos
Minimizando la historia
Tratando de alargar sus días
Aplicando un sano ejercicio proveniente de la física
A mayor extensión menor concentración
“Así al limitar el mundo a mis cuatro esquinas
El número de mis anécdotas a las esenciales y repetidas
Haré que me dure más la cuerda del reloj
Ese que llevamos s a cuestas
Desde que nacemos
Como el pistilo único de una flor perenne
Se estirará mi vida hacia lo alto
Mientras las demás se expanden a paso rápido
Hasta la delgadez desapareciente”
Me dijo
Fumando su cigarrillo electrónico
Saboreando su descafeinado

 

La otra versión

 

De todas las niñas que conozco
o que no conozco
pero que he visto en la plaza
en misa
en las caminatas por la playa
fue siempre la que más me gustó
decían que escribía versos
era un poco entradita en carnes
pero tenía un no sé qué
creo que ella me miraba a veces
pero cuando nos cruzábamos
daba vuelta la cara
nunca pude hablarle
una vez
envalentonado
después de unos tragos en el bar
me apersoné a su casa
cauto
en el pueblo
todos se conocen
La nodriza me dijo
“Alfonsina no está
ella se ha ido”.

 

Robot e identidad

 

Ponición de pilas. No parece adecuado. No se escucha, al menos yo no lo he escuchado. Postura de las pilas, ponerse las pilas es incluso una expresión, pero postura es además adoptar una posición, una idea, y es la manera en que se dispone el cuerpo, posición firme, por ejemplo. Para un F14 no está mal plantearse este tipo de preguntas (claro que no positivo manifestarlas). Un F14 se supone que es básicamente funcional, solo tiene intercambios verbales según sea necesario para efectuar alguna tarea con otras entidades. El F15 se supone que tiene un implante superior, con más entradas, aunque tenga un físico idéntico a nosotros, es decir humanoide. El F15 tiene además tareas de supervisión, sería quizás mejor decir supervigilancia, ya que precisamente esa falta de distinción aparente le permite desempeñar sus tareas. Tiene programado un manejo del lenguaje coloquial, del léxico y los modos de expresión, es decir pasar por gente. En cambio, cuando nosotros abrimos la boca se nota inmediatamente lo que somos, aunque nuestro físico sea humanamente bastante aceptable. He oído decir que el F15 puede incluso hacer el amor y pude experimentar placer. Nosotros en cambio tenemos que saber por ejemplo qué comer a la hora del desayuno, para no causar inquietud si nos toca compartir una mesa con trabajadores humanos, por ejemplo.

 

Razón, sillas, monstruos y cafés

 

“La razón que sueña monstruos me dijo la otra vez que ya no tiene mucho dónde elegir, que ya todo o casi todo ha sido inventado, imaginado y representado. Sentada de medio lado comentó que la silla era un gran invento “¿cómo imaginarse un conciliábulo por ejemplo de los griegos que hablaban echados?—todo el espacio que ocuparían, los de más lejos no entenderían nada. Entonces fue que decidieron hablar mientras caminaban, peripatéticos. Pero una se cansa, sobre todo en estos tiempos de tantas comodidades, de comida chatarra. Hasta a mí, que me gusta tanto hacer ejercicio, me están saliendo rollos. No se me nota, pero yo me doy cuenta. Mira, creo que los Starbucks, los Bridgeheads van a crear a la postre una revolución intelectual, que creo que nos está haciendo falta, aunque los iPod están un poco en el camino, porque con ellos la gente ni piensa ni conversa”. Sus ademanes de niña expresiva hacían brotar del aire formas inconclusas que no me atrevía a tratar de percibir con claridad. Entonces me desperté”. Eso me dijo ese joven aún que se junta conmigo a veces en este mismo café para contarme sus sueños. Me pasó su cuaderno lleno de dibujos. Se veía que no manejaba bien la técnica aunque mostraba bastante talento. Lo tengo ahora en la mesa del comedor, cerrado. A veces me fumo un cigarrillo, pese a mi edad, o me tomo una copa de vino o un café cargado y me atrevo a ojear una que otra página al azar. Después me cuesta conciliar el sueño en la noche. Lo voy a botar para la próxima recogida de basura.

 

Comidas y bebidas no tan solo de Chile

 

Un bistro muy quitado de bulla, unos hígados con cebolla, con tocino, muy buenos y baratos, a unos trece dólares—siete mil quinientos pesos chilenos—medio litro de un Shiraz australiano a 17 pepas de aquí el medio litro, barato. El único Shiraz pasable el australiano—estamos hablando de Canadá. Ayer pata de chancho en tajadas que se come envolviéndola en una hoja de lechuga, con una salsa especial y ajo—con vino californiano—mientras se cierne sobre gran parte del mundo el pájaro famélico de las inaniciones futuras o no tanto por el alza del precio de los alimentos, el cambio climático, la escasez de agua y el agotamiento de recursos

 

Los nuevos medios

 

El aura se desprende eléctrica a la manera de Chardin y adopta un aspecto tecnológico. Infinitas pantallas se despliegan en todos los centros poblados, no solo las ciudades. El mundo se viste y desviste según climas y estaciones. Los ojos se fijan en cada momento en el reflejo, en paraderos de buses, mesas de café. “Queremos olvidarnos de todo lo que no se relacione con nosotros, no permitamos ninguna intrusión en ese mundo que reproducimos. Que nada nos venga de afuera”.

 

jorge etcheverry 250Jorge Etcheverry
Chileno, en Canadá desde 1975. Poeta, prosista y crítico, Cronipoemas, su sexto libro de poemas, apareció en 2010. Su novela De chácharas y largavistas y su antología de narradores chilenos en Canadá, Northern Cronopios, son de 1993. Tiene prosa, poesía y crítica en Chile, Canadá, México, Cuba, Estados Unidos y otros países. Su Chilean Poets: A New Anthology fue publicada en 2011, en Estados Unidos. Aparece recientemente en antologías como Antología de poesía chilena I. La generación de los 60 de Teresa Calderón, Lila Calderón y Tomás Harris, 2012; Alquimia de la tierra, de Santiago Aguaded Landero y otros, España, 2013 y en Elogio del Bar, bares y poetas de Chile, Gonzalo Contreras, Chile,2014. Su colección de cuentos Apocalipsis con Amazonas, es de 2015. Es embajador en Canadá de Poetas del Mundo.

 

Selección de poemas de Jorge Etcheverry enviada a Aurora Boreal® por Jorge Etcheverry. Material publicado en Aurora Boreal® con autorización de Jorge Etcheverry. Foto Jorge Etcheverry  © Sharon Khan.

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